lunes, 19 de mayo de 2008
La Fuente de Cacho
Ayer te vi que subías,
por la alameda primera,
luciendo la saya blanca,
y el pañueluco de seda.
Dime dónde vas morena,
dime dónde vas salada,
dime dónde vas morena,
a las dos de la mañana.
Voy a la fuente de Cacho,
a beber un vaso de agua,
que me han dicho que es muy buena,
beberla por la mañana.
Dime dónde vas morena,
dime dónde vas salada,
dime dónde vas morena,
a las dos de la mañana.
Voy al jardín de Valencia,
a decirle al jardinero,
que me de una rosa blanca,
que en mi jardín no las tengo,
Dime dónde vas morena,
dime dónde vas salada,
dime dónde vas morena,
a las dos de la mañana.
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8 comentarios:
Vaya movidon toda la noche en Santander.
Yo que vivo en el Ayuntamiento, practicamente, era de alucinar.
Lo nunca visto.
No me extraña. En 95 años sólo hemos ganado algún Torneo la Galleta de Palencia... Para una vez que nos dan motivo, pues a celebrar.
Por cierto, estos días me he hartado de oír a los periodistas decir La Fuente del Cacho. Joder, cuánto paquete. La Fuente de Cacho, que no es tan difícil...
Pete te ha traicionado el subconsciente, creo. En la letra has puesto lo de la fuente del Cacho.
Por otra parte el subidón en Santander es brutal, salen aficionados hasta debajo de las piedras, la peña ya habla de viajar con el equipo a donde sea. Es la locura verdiblanca.
De Cacho, de Cacho; eso de "del Cacho" es la primera vez que lo oigo.
Jajajaja, será porque soy periodista, Txoff.
En serio, he sido víctima del copiar y pegar... ;))
Aunque en realidad creo que se referían a la Fuente de Cajo. Porque tú me dirás si vas por "la Alameda Primera" como coño acabas en el Sardinero...
Cierto es, ya se trató eso hace un tiempo por aquí y esa fue la conclusión. La canción hacía referencia a la Fuente de Cajo, pero como ni los más mayores del lugar se acordaban de ella, en algún momento se cambió por la de Cacho.
Algunos medios locales señalaban que la noche del domingo había cinco mil personas en la Fuente de Cacho.
Claro que también señalaban que había cien mil personas en la calle...
Igual es por lo de Fermín Cacho en Barna'92, que no me extraña que hasta a la infanta de limón se le cayera el moquillo, aunque fuera unos días antes.
Hoy he visto a Marcelino llorando en su despedida y es de las veces que ha parecido de verdad; esté o no equivocado en su decisión, seguro que muy meditada, pero más claro no se puede hablar.
Hay que saber irse de los sitios, que esto del deporte es para desmemoriados.
un abrazo cracks de cracks.
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