Sábado 17 de agosto. Convocatoria
monstruo para la IX edición del Galizano's Court. El organizador
reconoce en petit comité que es un desastre, que ese año no se lo
ha currado nada, que la molicie ha estado a punto de hacerle tirar la
toalla... Pero 48h antes de la fecha se decide a dar un empujón a la
cita y a través de Facebook hace una llamada a los mitics.
Así de primeras parece que las
vacaciones pueden jugar en contra del evento, una vez más. Agentes
libres desaparecidos, lesionados de larga duración, trabajadores
españoles enriqueciendo a otros países con su talento, escaqueitors
varios, que si hace bueno y me voy a El Puntal... En fin, clasicazos.
Un par de whatsapps y se garantiza la
asistencia de algún miembro de la familia, otros se apuntan vía
FB... Parece que habrá partido. Y así es. El día amanece
espléndido, caluroso y con un sol que resultará implacable.
Una vez en la cancha Peter Mihm es
retado por un lugareño a jugar un dos contra dos. Sorprendido por la
oferta, pregunta la edad al que podría ser su hijo: “Dieciseis”.
¡Glups! Un tipo de 45 palos, jugador ochentero 'old school' retado
por alguien que no vio ni la plata de Los Ángeles ni el Angolazo, ni
nada de nada. Uno de estos jóvenes que sólo tienen recuerdos
recubiertos de oro y metales preciosos.
Ni corto ni perezoso el ex all around
player acepta el reto, aunque dice que está esperando a unos
colegas, que no tardan en llegar. Es tal la afluencia de cracks que
se opta por jugar a dos canastas, algo inédito en la historia de la
quedada.
Dos de los lugareños optan por
participar, dos jugadores versátiles con ganas de balón y que no
respetan las canas; Ramiro, eficaz power forward; Guille, base
eléctrico de 10 años, pero ya fogueado en infantiles pese a ser
alevín de primero; los hermanos O'Brigon, Borin y Litros,
bases-escoltas en perfecto estado de forma; Javi Toy, uno de los
mejores cuatros de 44 años de España, con el número 2 de los Cavs a la espalda (DaJuan Wagner), una de las camisas más malditas de la historia reciente de la NBA; y Mihm dan comienzo a un
cuatro para cuatro a toda la cancha.
Poco después se suma Javi Shatt, con
su tiro eléctrico bien engrasado. Para completar el 5 vs 5 se suman,
por turnos, dos valientes: Pistol Lu y Marta, ambas curtidas en los
Juegos Municipales madrileños.
Los partidos a 10 canastas se suceden.
Se ve aro con facilidad. Y es que, claro, tener a Toy en tu equipo es
un seguro de vida: un mal pase termina casi siempre contando como
asistencia. Los lugareños se dejan ver. Tienen aire en sus pulmones
y piernas frescas, pero fallan sus intentos de mate una y otra vez.
Toy se hace con el MVP unánime. Y
todos los presentes cumplen de largo. A Borin se le acaba la pista
–acostumbrado a subir a La Morra de Lechugales, el 28x14 se le
queda muy mini–. Litros se muestra muy activo en los dos lados de
la cancha. Ramiro exhibe poder interior. Guille termina descontento
por los tiros fallados, pero demuestra una vez más que los años -de
menos- importan entre poco y nada. Mihm acaba con un ratio de 1
pérdida por cada 2,5 asistencias dadas a Toy. El Shatto demuestra
una vez más que, desayune bien o mal, siempre te va a meter ese tiro
de media distancia. Pistol Lu y Marta aportan dirección y ganas. Hay
relevo; hay que quedarse con eso.
En la hora de los mates, pocos
candidatos. Los del lugar ya se han ido y sólo Toy y Pete parecen
dispuestos. El rubio barbudo demuestra que hay poderío de sobra para
dominar el aro. Algunos veteranos hacen sus vuelos rasantes por
debajo del aro. Nada, desayunos insuficientes, ballestas poco o nada
engrasadas, viejas lesiones, que si la abuela fuma...
Mihm acepta el reto de Pepsi y alterna
alguna que otra cagada estafoide con varios dunks de mérito. La
suave preparación previa al G's C parece dar sus frutos y la rodilla
mala no evita que el fondón alero meta para abajo más de media
docena de buenos caponazos. El que tuvo, retuvo. ¡Qué coño!
Como anunciaba la convocatoria de FB
llega la hora de las rabas. El basket and rabucas marida como pocas
cosas. Y el éxito de esa otra parte del evento vuelve a garantizar
que ya se piense en la X edición, la de 2014. Brindis por Barri,
copas de cerveza (con limón) y unas cuantas de rabas, recuerdo para
los que no pudieron venir (con especial mención a Panchov y
Antonello) y a la playa a descansar. Y un pensamiento: nada como unos
buenos baños en el mar para restañar los dolores después de un
partido a toda la cancha... Nos vemos en las canchas.
5 comentarios:
Da gusto leer estas palabras Pete, y da gusto ver que hay mas enanos en la foto que viejas glorias...a ver si un año de estos puedo tomar parte again! Disfruté de Cantabria en el mes de Julio pero Agosto ya vió mis huesos en Kiwiland.
Un abrazo a todos los participantes y los ausentes...y a los ausentes participantes!
¡ENORRRRRMMMEEEEEE!.
- Litros-
La verdad es que es una pena que nos reunamos tan pocas veces, porque la energía que te dan estos encuentros dura muchas lunas...
Este año lo pasé especialmente bien. Y es que siempre es un gustazo compartir cancha y rabucas con gente tan increíble.
Solo con veros me he lesionado. Siempre que leo la crónica del match me doy un puñetazo en el pecho y me digo "el año que viene voy seguro". Y así llevo los últimos 5 años. Echo de menos los contraataques con Javi, los tapones a Toy (jejeje es broma, en realidad se dice "de Toy"), los mates de Pet, la defensa de Carlos Sachetti y las risas con Borin, pero sobre todo las raaabasss. Nos vemos en la cancha en el 2014. Un abrazo ANTONELLO.
Bien sabes, querido Antonello, que se te echa de menos un huevo. Confío en una suave puesta a punto desde ya para poder acudir a la X edición. Total total, la exigencia no la marcan el nivel de Toy, Borin, Litros o Javi.
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