Diecisiete años en Madrid no logran que uno se olvide de algunas cosas... La foto está hecha por sorpresa en plena fase de rehabilitación de la rodilla derecha. Hacía fresquito y el bolsillo de la sudadera me vino de perlas; cuando se me enfrían las manos, malo. Nada como pasear con el agua por los tobillos. Placer de dioses.
9 comentarios:
Eso lo cura todo, tobillos , rodillas, caderas, cuerpo, alma...
Veo que hoy se está levantando un poco de sur. Y la marea baja en la Primera de ahora mismo es una invitación a pasear con el agua por el tobillo. A ver si una primitiva me permite disfrutar de esos lujos gratuitos, pero lejanos...
Eso, eso, yo también me apunto a lo de la primi. Lujos cercanos, pero a veces tan lejanos como en Madrid.
A lo mejor hace dos meses que no paso por el Sardinero.
¡¡Que estres de trabajo, jod...!
Por eso te digo. Son lujos baratos, pero que nuestra realidad cotidiana convierte en caros. Lo caro es el tiempo...
Hola soy la hermana de Jose y entro en este blog todos los dias pero no me atrevia todavia a decir nada,no sabeis lo que ayuda leer todo lo que habeis compartido y me hago cargo del vacio que os ha dejado,creo que cada uno somos nosotros y nuestras circunstancias y una parte de Jose la componiais vosotros y por eso el es asi,leeros cura.Gracias
Un fuerte abrazo, Paloma.
Todos los días está un rato en nuestra mente y nos ayuda a seguir hasta donde nos toque.
Llenó nuestra vida y con todo eso seguimos.
Gracias Barri.
Gracias Pet.
Paloma, es muy fuerte. Hoy mismo, no me digas porqué, he estado pensando en ti y en Dani. Hasta casi cojo el teléfono y llamo a tu madre...
Nó hay día que pase en que no le tenga en mis pensamientos. Jose era un GRANDE entre los grandes. Y por eso nos ha dejado esta huella tan inmensa, ese vacío tan imposible de llenar y ese manantial de recuerdos y de sentimientos, todos siempre de un positivo que hasta asusta.
Es exactamente lo que dice Carlos -otro GRANDE-, "llenó nuestras vidas". Ya lo creo.
Gracias, Carlos.
Gracias, Paloma.
Gracias, Jose.
Y van dos...
Me siento muy honrada de que mis pinitos con la cámara te sirvan de apoyo (e inspiración, por qué no)para tus siempre enriquecedoras reflexiones.
Además, ahora ya no podrás quejarte cuando me veas llegar con la cámara a todas horas, je, je.
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