Ésta en clave de surf; la historia de Bethany Hamilton. El temazo que cierra la película Soul Surfer me hace echar mucho de menos a un luchador como Barri...
The Unknown
(Athlete)
Let your world be wide open
And your fears be blown apart
May your voice be louder than bombs
Somewhere in silence find one to trust
Lift your head up, untie the knot
My little sunshine hope is never light-years away
Let your senses be ignited
By streams of neon singing in the dark
Connected to the planet
A million neighbours, a sea of stars
Lift your head up, untie the knot
My little sunshine hope is never light-years away
Leaders, lovers come and go
Outside forces you can't control
Oh I see you smiling at the unknow
Oh I see you smiling at the unknow
Lift your head up, untie the knot
My little sunshine hope is never light-years away
Hope is never light-years away
Hope is never light-years away
Con Barri adquirí una deuda conmigo mismo eterna, impagable: la que contraes con quien te da todo y no te pide nada. Una persona con una manera de ser que uno sólo podrá soñar con alcanzar. Alguien ejemplar, luchador, bueno. Un ser con ese carácter soñado, imposible, irrepetible.
Esa deuda a veces me abruma; me deja muy alto el listón, y uno no da para mucho más... La canción ésta me recuerda muchas conversaciones con Barri. Sueños de surf, de playas, de olas, de relax. Siempre soñamos con surfear juntos, pero no pudo ser.
Ahora, eso sí, queda un sueño por cumplir: el de surfear en nuestras queridas playas del otro lado de la bahía. Sé que si ese momento llega Barri estará orgulloso de mí. Y tengo muy claro que el día que me suba a mi tabla no estaré solo.
Por otro lado, siempre viene a cuento mirar hacia atrás y recordar lo que dijimos de él en su momento: El hombre a una sonrisa pegado.
Y si pinchas aquí podrás leer todo lo escrito en este blog en homenaje a El Gran Barri.
Blog sobre sentimientos, amigos y recuerdos. Un espacio para sacar de nosotros lo mejor que llevamos dentro. El lugar donde rememorar a Barri es casi una obligación, además de una devoción. Y como dice la bendición irlandesa: "Que el viento sople a tu espalda, que el camino salga a tu encuentro, que el sol entibie tu cara, y hasta que volvamos a encontrarnos, que Dios, el amor, o en quien tú creas, te sostenga en la palma de su mano". Que así sea.